El presidente Luis Abinader pronunció un discurso en la 20ª Reunión Regional Americana de la OIT, donde enfatizó la importancia del trabajo decente como pilar fundamental para el desarrollo, la paz y la justicia social en América Latina y el Caribe. El mandatario destacó los logros de República Dominicana, que ha puesto el empleo en el centro de sus políticas públicas.
Abinader afirmó que el trabajo va más allá de un simple contrato o ingreso; es “identidad, dignidad y libertad”. Señaló que en la región, cerca de la mitad de los 300 millones de trabajadores aún se encuentran en la informalidad, sin seguridad social ni derechos garantizados, lo que hace urgente el diálogo para buscar soluciones.
Logros y avances en República Dominicana
El presidente presentó a República Dominicana como un ejemplo de que un enfoque en el empleo genera resultados positivos. Destacó los siguientes puntos:
Crecimiento económico: El país lidera el crecimiento en la región, con tasas superiores al promedio.
Creación de empleo: Se han creado más de 200,000 nuevos empleos formales en los últimos años, lo que demuestra una sólida recuperación post-pandemia.
Aumento del poder adquisitivo: Por primera vez en décadas, el salario mínimo del sector privado cubre en promedio el costo de la canasta básica.
Turismo como motor: El sector turístico ha superado los 11 millones de visitantes, sosteniendo 750,000 empleos directos e indirectos y consolidándose como un gran generador de oportunidades.
Formación técnica: A través de INFOTEP, se ha capacitado a más de 3.5 millones de personas desde 2020, y el número de centros de formación pasó de 8 a 56 en todo el país.
Reducción de la pobreza: El mandatario anunció que los datos de pobreza han disminuido al 16.6%, el nivel más bajo en los últimos años.
Compromiso con la igualdad y la inclusión
Abinader también hizo un llamado a cerrar la brecha de género en el mercado laboral, señalando que solo el 47% de las mujeres participan en la fuerza laboral, frente al 72% de los hombres. “Si queremos que América Latina sea competitiva, debemos garantizar que el talento femenino tenga las mismas oportunidades de trabajar y de crecer”, expresó.
El presidente concluyó su discurso afirmando que el verdadero éxito de un país no se mide por su infraestructura, sino por la dignidad de su gente trabajadora, la esperanza de sus jóvenes y la recompensa por su esfuerzo. “No hay desarrollo posible sin justicia social, y no hay justicia social sin trabajo digno”, finalizó.